EL AUTOR

Manuel R. Gutiérrez

Bienvenidos a Astronomind, donde servidor se esfuerza en reconciliar la escala cósmica con la humana. Dado que soy aficionado y no experto, y como me encanta escribir, quiero que mis palabras sirvan de puente para aliviar esa distancia, esa brecha entre un universo que la mayoría del tiempo nos es ajeno —inmersos como estamos en nuestras más o menos abarcables rutinas— y nosotros mismos. Yo mismo me siento a mitad de camino entre la exactitud, la fórmula y la sencilla fascinación del no iniciado, que existe por el mero hecho de ser persona y tener órganos de los sentidos. No estoy frente a la pizarra de una institución científica, pero albergo una curiosidad insaciable por la astronomía y la cosmología desde que tengo uso de razón. Creo que estoy en una posición ideal para comunicaros y recordaros a vosotros, mis lectores, de dónde venimos y que la naturaleza y sus fenómenos —que nos rigen— también dictan la evolución y los eventos cósmicos. Todo esto mientras yo mismo expando mis conocimientos y aprendo, ya que el margen de mejora siempre es amplísimo.

Hay que pararse deliberadamente a observar nuestro cuerpo y pensar que no estaríamos aquí si una estrella no hubiera explotado hace mucho. Que entre facturas, peleas e hipotecas, no somos más que una extensión del propio espacio tiempo que todo lo permea; que mientras se nos hunde el pecho de ansiedad por un problema que parece no tener o no tiene solución —y estamos en todo nuestro derecho de sentirla, porque nuestra realidad inmediata y acuciante es una dimensión privada, empaquetada y real perteneciente a la enrevesada topografía del todo— ahí fuera hay brotes de rayos gamma, sistemas binarios de estrellas donde una es caníbal y la otra está siendo devorada, discos de acreción pariendo nuevos mundos y agujeros negros que todo lo tragan y desafían a todo conocimiento, el verdadero hic sunt dracones del siglo veintiuno. Que todo esto sucede durante tu rutina y es tan real como tú, y que, pese a mi insistencia en jugar al contraste, en el fondo, tú y el agujero negro sois lo mismo. Somos lo mismo.

Os invito a leer la página LA IDEA para saber más concretamente qué busco conseguir con el proyecto y de qué quiero hablar en sus diferentes secciones.

Por último, os deseo cielos claros y espero que disfrutéis de explorar Astronomind tanto como yo escribiéndola.